jueves, 6 de octubre de 2011

Tarde




En tu grito desesperado
callas el silencio
que te invade.

Palabra que queda en tu almohada
adormecida sin poder ser oración.

En eso que no dijiste
se esconde lo que en realidad
un día soñé escuchar.

Hoy ya es tarde.
Las agujas del reloj
marcan un tiempo
en el que no alcanzan
lamentos ni temores.

Es tarde y no lo querés ver,
te escudás en tu cueva
VALOR... simplemente no tenés.

1 comentario:

Ramacharaka dijo...

que buena radiografía al tiempo subjetivo...