Quisiera tan sólo un instante de silencio, de paz para poder meditar acerca de qué es lo que sucede a mi alrededor.
El tiempo resulta macabro cuando se busca perderlo en ese desierto que con tortura caminas en busca de un paisaje que haga más placentero tu andar.
La gente se preocupa por temas imperceptibles dentro de ese oscuro abismo que te suele esconder.
Ya no escuchas aplausos, el telón se ha bajado y aunque te pidan a gritos que recuperes aquella acción, la misma inercia que vienes acumulando se recicla en una obsesión.
Sueños frustrados en tus bolsillos como si fueran piedras clavadas que no logras vencer.
Tu mirada perdida en el medio de un llano que sólo tus ojos pueden ver.
Y no quieres explicaciones, ya no te alcanzan ni te van a hacer cambiar dentro de tu camino que un día cercano tendrá que caer.
Despierta de esta pesadilla, emprende de nuevo un desafío, no tienes más que temer.
Dáte una oportunidad de modificar esos asuntos prohibidos que escondes en tus labios por miedo al menosprecio ajeno que tanto si tanto lo persigues comenzará a ser.
1 comentario:
hola cony, no se si te acordas de mi, pero yo me acuerdo de vos.
me encanto lo que escribiste y el mensaje que tiene.
un abrazo enorme
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